The Special One

Desde hace días tengo una idea recurrente en mi cabeza y no consigo sacármela.  ¡Por desgracia ni el alcohol ni las drogas me ayudan! Es tan descorazonador...

¿Cómo puede ser que alguien que es venerado, idolatrado y defendido a muerte por sus subordinados pueda crear tanto rechazo entre los demás mortales?

Sí, hablo de José Mourinho, el fichaje más galáctico de la nueva época de Florentino, el as en su manga, una escalera real que sale gracias al 'river' final.

Y no dejo de pensar que qué culpa tiene el pobre hombre si se le contrata para que entrene y gane. Él está cumpliendo. ¡Digámoslo ya!: lo hace de fábula.

Todo el mundo vive a su costa: los periodistas le utilizan para vender más periódicos, sus compañeros de profesión aprovechan la oportunidad para conseguir mayor proyección mediática, el eterno rival sufre al ver que este es EL HOMBRE que pude terminar con su imperio recién levantado. Los merengues le adoran: al fin y al cabo es el único "míster" que les puede devolver la ilusión. No importa su seriedad. Es serio porque está seguro de sí mismo y de las capacidades de su equipo. Sin embargo, los sentimientos que hace aflorar son contradictorios: los forofos del deporte rey le aman y le odian por igual.Y gente que jamás se ha interesa por el fútbol, empieza a sentir el cosquilleo del interés en el estómago.

Dicho esto, no me queda más remedio que nombrar a José Mourinho el mejor director de teatro. Recordad: "He's the one".

Pero no olvidéis que en el Camp Nou Pep Guardiola revoluciona el arte futbolístico.